jueves, 21 de noviembre de 2013

Los Barbaros

Los Bárbaros:


Los Griegos se referían de un modo a los extranjeros quiere decir a los que no hablan griego que para los griegos eran  como un balbuceo indefinible los mexicas o mayor mente conocidos como aztecas  dieron a otros pueblos vecinos que consideraban inferiores existen escritos de lo isocrates que dan a la luz que el pueblo que se encontraban los bárbaros no eran extranjeros sino que tenían falta de educación.

Los romanos dieron de bárbaros a los pueblos que invadieron el imperio romanos y, mas en general, a todos los extranjeros de las comarcas fronterizas con el imperio.



A pesar que durante mucho tiempo se consideraba como bárbara tan sólo la civilización de los otros y así -por contraposición- legitimar y ensalzar la civilización propia, pensadores críticos modernos como Walter Benjamin han destacado que toda civilización o cultura enraiza en algún tipo de barbarie propia y no ajena.


  • El de raza amarilla (avaros y hunos)
  • El de raza blanca eslava (Vendos, en lo que hoy es Polonia), Sármatas, en el Danubio y Alanos, a orillas del mar Negro
  • El de raza blanca no eslava, grupo que se detalla a continuación.

"El bárbaro labra para nosotros; aquel que durante tanto tiempo nos ha arruinado con sus saqueos ahora se ocupa de enriquecernos(...).


miércoles, 20 de noviembre de 2013

El Feudalismo

El Feudalismo: 


Feudalismo es la denominación del sistema político predominante en la Europa occidental de los siglos centrales de la Edad Media (entre los siglos IX al XI, aunque no hay acuerdo entre los historiadores sobre su comienzo y su duración, y ésta varía según la región) , y en la Europa Oriental durante la Edad Moderna, caracterizado por la descentralización del poder político; al basarse en la difusión del poder desde la cúspide (donde en teoría se encontraban el emperador o los reyes) hacia la base donde el poder local se ejercía de forma efectiva con gran autonomía o independencia por una aristocracia, llamada nobleza, cuyos títulos derivaban de gobernadores de Imperio carolingio (duques, marqueses, condes) o tenían otro origen (barones, caballeros, etc.).
El término «feudalismo» también se utiliza historio gráficamente para denominar las formaciones sociales históricas caracterizadas por el modo de producción que el materialismo histórico (la historio grafía marxista) denomina feudal. 
Como formación económico-social, el feudalismo se inició en la Antigüedad tardía con la transición del modo de producción esclavista al feudal; a partir de la crisis del siglo III y sobre todo con la disolución del Imperio romano de Occidente (siglo V) y la formación de los reinos germánicos y el Imperio carolingio (siglos VIII y IX).
Fundamentado en distintas tradiciones jurídicas (tanto del derecho romano como del derecho germánico -relaciones de clientela, séquito y vasallaje-), el feudalismo respondió a la inseguridad e inestabilidad de la época de las invasiones que se fueron sucediendo durante siglos (pueblos germánicos,eslavos, magiares, musulmanes, vikingos). Ante la incapacidad de las instituciones estatales, muy lejanas, la única seguridad provenía de las autoridades locales, nobles laicos o eclesiásticos, que controlaban castillos o monasterios fortificados en entornos rurales, convertidos en los nuevos centros de poder ante la decadencia de las ciudades.
Desde el punto de vista institucionalista, el feudalismo fue el conjunto de instituciones creadas en torno a una relación muy específica: la que se establecía entre un hombre libre (el vasallo), que recibía la concesión de un bien (el feudo) por parte de otro hombre libre (el señor), ante el que se encomendaba en una ceremonia codificada (el homenaje) que representaba el establecimiento de un contrato sinalagmático (de obligaciones recíprocas). Esta serie de obligaciones recíprocas, militares y legales, establecidas entre la nobleza guerrera; giraba en torno a tres conceptos clave: señor, vasallo y feudo. Entre señor y vasallo se establecían las relaciones de vasallaje, esencialmente políticas. En el feudo, entendido como unidad socio-económica o de producción, se establecían relaciones de muy distinta naturaleza, entre el señor y los siervos; que desde la historio grafía marxista se explican como resultado de una coerción extra económica por la que el señor extraía el excedente productivo al campesino. La forma más evidente de renta feudal era la realización por los siervos de prestaciones de trabajo (corveas o sernas); con lo que el espacio físico del feudo se dividía entre la reserva señorial o reserva dominical (donde se concentraba la producción del excedente) y los mansos (donde se concentraba la producción imprescindible para la reproducción de la fuerza de trabajo campesina).

Los Francos

Los Francos:

Los francos  fueron una comunidad de pueblos procedentes de Baja Renania y de los territorios situados inmediatamente al este del Rin (Westfalia), que, al igual que muchas otras tribus germánicas occidentales, entró a formar parte del Imperio romano en su última etapa en calidad de foederati, asentándose en el Limes (Bélgica y norte de Francia actuales). Las poderosas y duraderas dinastías establecidas por los francos reinaron en una zona que abarca la mayor parte de los actuales países de Francia, Bélgica y Países Bajos, así como la región de Franconia en Alemania.
La palabra franco (Frank o Francus ) significa «libre» en el lenguaje franco, ya que los francos no estaban dominados por el Imperio romano ni por ningún otro pueblo.
Dado que la raíz frank no pertenece a la lengua germánica primitiva, se piensa también que podría derivar de frei-rancken (libere vacantes) que significa libres viajeros.

Los primeros francos:


No se sabe mucho de los inicios de la historia de los francos. El cronista galo-romano Gregorio de Tours, autor de la Historia Francorum (Historia de los francos), que cubre el período hasta el año 594, es la fuente principal. En ella cita a su vez como fuentes a Sulpicio Alexander y a Frigeridus (los cuales serían desconocidos de no ser por él), además de aprovechar su propia Historia de Gregorio, existen además otras fuentes romanas anteriores, como Amiano y Sidonio Apolinar.


Los estudiosos modernos dedicados al período de las migraciones han sugerido que el pueblo franco podría haber surgido de la unificación de grupos germánicos anteriores más pequeños (Usipeti, Tencter, Sugambri y Bructeri), que habitaban el valle del Rin y los territorios situados inmediatamente al este. Esta unión podría estar relacionada con el aumento del caos y las insurrecciones acontecidas en la zona como resultado de la guerra entre Roma y los marcomanni, que había comenzado en el año 166, así como de los conflictos derivados de ésta durante la segunda mitad del siglo II y el siglo III.